jueves, 14 de mayo de 2009

Sin títolo

Hoy estamos muy orgullosos de traerles una nueva sección para los jueves en la que vamos a incluir cada semana alguna leyenda urbana que forma parte del folclore con el que hemos crecido desde chamacos y que no estamos seguros de que sea cierto o no. Como dicen, le sucedió a la amiga de la prima de un amigo y la historia crece y se manipula de boca en boca hasta convertirse en una leyenda urbana. 
Hoy comenzamos con la historia de una morrita y su peinado, pero antes de irnos con ella quiero invitarlos a que ustedes, la banda shilera, le ponga el nombre a la sección mandándonos un correo a sushilote@hotmail.com y proponiéndo el que más les parezca. Ahora sí, aquí vamos...

"Cuando yo tenía 15 o 16 años, los peinados altos y llenos de spray estaban muy de moda. Era casi un concurso saber qué chica tenía el de mayor tamaño, que instantáneamente era la más popular. Yo fui un día a la estética para lograr este bonito peinado y el estilista me platico lo que le sucedió a la amiga de su sobrina...

Esta muchacha era un tanto vanidosa y su afán de estar siempre a la moda era desmedido. En aquella época, decidió que su peinado sería el más alto y el más vistoso de todas las muchachas con las que convivía, y lo logró. Todos los días se le veía aquel cabello grandioso y reluciente que causaba la envidia de las mujeres y la admiración de sus compañeros que lo consideraban hermoso, pero solo ella sabía la verdad. Para no arruinar su cabello, había decidido no quitarse el peinado, no lo lavaba ni lo peinaba y dormía sentada para que se mantuviera intacto, tal y como lo quería. Un día, comenzó a sentir una pequeña punzada en su cabeza pero creyó que todo se debía a la presión que ejercía el cabello sobre su cuero cabelludo, hasta que un día estando en clase el dolor se hizo insoportable y se desmayó. El maestro y sus compañeros vieron un hilillo de sagre correr por su cuello e inmediatamente llamaron a una ambulancia. La chica llegó inconsciente al hospital donde los médicos se apresuraron a deshacerle el peinado, debajo del cual encontraron un nido de viudas negras dentro de su cabeza. En algún momento, la muchacha había chocado con una telaraña y una viuda negra había caído en su peinado creando un nido ahí..." 



1 comentario:

Sergio Glez. dijo...

Esa no la habia escuchado... yo me sabia el de la novia, prima segunda de la cuñada de un amigo, que fue a Aguillón a alaciarse el cabello para su boda y que se le cayo todo. Tuvo que cancelar la boda a ultimo momento. Segun se dice...